Ojos secos, ¿qué hacer?

En el post de hoy queremos hablaros de los ojos secos, una dolencia cada vez más extendida y que, aunque no se trata de una enfermedad grave, hay que saber reconocer y atajar a tiempo.

Las lágrimas son necesarias para lubricar los ojos y para la eliminación de partículas y cuerpos extraños en nuestros ojos. Éstas son necesarias para una buena visión.

Los ojos secos se desarrollan cuando el ojo es incapaz de mantener una capa saludable de lágrimas, y las causas pueden ser diversas.

El ojo seco generalmente se da en personas que normalmente tienen buena salud. Se vuelve más común con la edad. Esto puede ocurrir por cambios hormonales que hacen que los ojos produzcan menos lágrimas.

También existen otras causas de sequedad en los ojos tales como  ambiente o sitio de trabajo seco,  exposición al sol, tabaquismo o el ser fumador pasivo o tomar medicamentos para el asma o las alergias. Así mismo,  el ojo seco también  pueden provocarlo calor o quemaduras, cirugías oculares o algunas enfermedades autoinmunes.

Cuando se tienen los ojos secos, los síntomas suelen ser visión borrosa, ardor, picor etc.

Para paliar los efectos de estas molestias, lo primero que  se ha de hacer es utilizar lágrimas artificiales entre dos y cuatro veces al día. Si esto no funciona se debe aumentar la frecuencia y utilizarlas cada dos horas.

Además, es recomendable evitar fumar o frecuentar lugares con humo, utilizar un humidificador, parpadear más frecuentemente a propósito, descansar la vista con asiduidad, y limpiar varias veces al día las pestañas utilizando compresas húmedas.

Si aún así los síntomas no mejoran, te recomendamos lo de siempre: consulta con tu médico la mejor solución.

¡Hasta la próxima entrada!