En las líneas de este post vamos a hablaros de la retinosis pigmentaria, una enfermedad ocular, o mejor dicho, un conjunto de enfermedades de los ojos que, como su propio nombre indica, afecta sobre todo a la retina.
La retinosis pigmentaria es un grupo de enfermedades degenerativas que afectan a nuestros ojos y que se caracterizan por provocar una pérdida paulatina de la visión.
Esta dolencia ocular es bidireccional, lo que significa que afecta a ambos ojos por igual, y además dicha pérdida de la visión es periférica y va a compañada de deslumbramiento. Con el tiempo, la retinosis pigmentaria puede producir ceguera.
En algunas ocasiones, la retinosis pigmentaria va a acompañada de otras enfermedades oculares como la miopía, el astigmatismo o las cataratas entre otras.
Los principales síntomas que tiene la retinosis pigmentaria son:
- Ceguera nocturna: esto se refiere a la dificultad de ver con claridad en sitios con baja iluminación, además de la falta de capacidad de ver en un sitio oscuro cuando se pasa a éste desde una zona con luz, pasado un tiempo normal.
- Disminución del campo visual: se produce tras aparecer la ceguera nocturna, y es lo que se conoce como visión en túnel, ya que la visión periférica se va Perdiendo.
- Disminución de la agudeza visual.
- Alteración en la percepción de los colores: cuando la enfermedad está muy avanzada, empiezan a percibirse mal los colores, en especial el azúl y el amarillo.
- Fotopsias: luces pequeñas o flases que por lo general el individuo percibe en la parte periférica de la visión y que le dificultan ésta.
¡Hasta la próxima entrada!